COMENTARIO - TRÍPTICO DEL CARRO DE HENO (EL BOSCO)

 

Ficha técnica

• Título: Tríptico del carro de heno
• Autor: El Bosco
• Estilo: Renacimiento neerlandés
• Fecha: 1512-1515
• Técnica: óleo sobre tabla
• Dimensiones: 135 x 100 cm
• Localización: Museo del Prado, Madrid

El Bosco, un maestro de la simbología

La obra que nos ocupa consta de tres paneles bien diferenciados que en su conjunto conforman un retablo. El de la izquierda nos muestra la creación de Adán y Eva, así como el Pecado Original y la expulsión del Paraíso. El del centro, que será el que analicemos a continuación, representa un enorme carro de heno alrededor del cual una serie de personajes realizan acciones muy variadas. A la derecha, el Infierno.

El significado del heno

La importancia del heno durante la época en la que se realiza el cuadro es enorme ya que servía, entre otras cosas, como combustible para las frías noches de invierno. Además estamos en un contexto en el que la acumulación de bienes y riquezas así como la decadencia de la Iglesia católica eran temas de candente actualidad. El Bosco hizo esta obra pocos años antes de que Lutero llevase a cabo la Reforma protestante (1517-1521). Se viene reflejando así una decadencia del catolicismo pero también la supresión de las estructuras gremiales o la implantación de nuevas vías de negocio derivadas de la industria y del comercio. Un vaivén de acontecimientos que el Bosco refleja a la perfección en esta obra.

La simbología hecha palabra

Según se ha interpretado, esta escena de El Bosco puede tener cierta relación con el proverbio "El mundo es un carro de heno del cual cada uno toma lo que puede". Si nos fijamos atentamente, la gran mayoría de las figuras se agolpan alrededor del carro de heno con el único fin de hacerse con una parte del preciado botín. Sin embargo hay otras que se mantienen pasivas ante este hecho. Es el caso del emperador, el Papa y el rey de Francia (a la izquierda del espectador), quienes se limitan a ver lo que sucede. De esta forma, El Bosco refleja cómo todas las clases sociales del momento pretenden aumentar despiadadamente su riqueza pero son solo los más desfavorecidos los que tienen que luchar literalmente por ella.

A la derecha del espectador, unas figuras demoníacas guían el carro de heno previsiblemente hacia el infierno (que es la siguiente tabla). Son ayudantes de Satán, cuya única tareas es la de seducir a los más ávaros para llevarlos hasta el fuego eterno. Debemos remitirnos en este punto a lo que dice el profeta Isaías:

Toda la carne es como el heno y todo esplendor como la flor de los campos...el heno se seca, la flor se cae

La relación entre la escena y el texto parece evidente. De esta forma, las riquezas, como el heno, se acaban pronto. Son atractiva, pero pasajeras.

Es interesante también la composición de la obra en diferentes estratos y algunas escenas que llaman poderosamente la atención. En la parte superior y tras unos campesinos se besan fervientemente (lujiria) mientras son observados por una lechuza (símbolo de la herejía). Otros tres se centran en la música y uno, al fondo, observa la escena escondido. Cierra la escena un demonio de tonos azules con cola de pavo real (vanidad) que toca un instrumento y un ángel que mira al Cristo de la superior. Es sin duda un conjunto bastante enigmático.

Versiones

Se conocen dos versiones de esta obra. La original se encuentra en el Museo del Prado pero existe una segunda copia Monasterio del Escorial. Felipe II adquirió la obra en el año 1570 a unos herederos de Felipe de Guevara y la trasladó al monasterio en el año 1584. Allí unos miembros del taller conocía perfectamente la técnica realizaron la copia. 

Tal y como se puede ver en otras obras del artista, en esta también se refleja el mundo alejado de la divinidad y planteando la idea de quienes se venden a los bienes terrenales y se alejan del amor a Dios. Sin embargo este que mensaje podría tildarse como tradicional, se realiza a través de técnicas notablemente modernas que aun manteniendo tintes de la pintura gótica medieval nos habla de lo que veremos más adelante en época del Renacimiento. 

Podríamos incluso extrapolar el significado de los personajes que se balancean sobre el carro de heno con aquellos que hoy en día intentan explotar al máximo los recursos naturales llevando así al planeta hacia un desastre casi inminente.

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